Quiero compartir contigo como empezó este camino. Todo comenzó con este correo donde te contaba lo importante de comunicarnos con nuestro entorno, nuestra familia, amigos y por supuesto clientes, para conseguir mejores resultados, más satisfactorios para todos, todo ello como siempre con las historias como hilo conductor. Como siempre intentando que sea una lectura entretenida de la que saques tus propias conclusiones.

Aquí tienes aquel primer correo

El fin de semana pasado quedamos ¡por fin!, con unos amigos para salir. 

Al campo, no de botellón.

Yo he pasado miedo esta última parte de la pandemia porque todos estamos ya cansados y hasta un poco confiados y me he resistido hasta ahora.

Bueno pues todo preparado el sábado por la mañana para disfrutar de un soleado, aunque aún soportable día de calor, todavía no hemos llegado a superar los 40º.

La idea era movernos durante la mañana y llegar a la hora de comer a un pinar superbonito y fresquito para ya quedarnos ahí las horas de más calor.

Disfrutando de la naturaleza, los amigos, la cervecita bien fría y la comida. 

Está claro que el valor añadido de un día de campo es esto último o no?  

Quién no ha disfrutado en el campo con unos ricos filetitos empanados, o croquetas que frías están igual de buenas, un tomatito picado en ensalada, pollo frito yyyyyyyyyy TORTILLA DE PATATAS.

Bueno pues no sé si fue que habíamos perdido la costumbre, que nos faltó comunicación o que no coordinamos la salida.

En nuestro primer día de salida al campo SOLO había Tortilla de patatas.

Nunca pensé que diría esto porque adoro, amo la tortilla de patata, pero ¡menudo chasco!

Las tres parejas que fuimos pensamos, así pa’ dentro de nosotros mismos, en hacer tortilla porque es lo que suele gustar más comer y menos hacer.

Pero 5 tortillas 🤪 y ni un mal filetito ruso aunque sea, nos dejó a todos chafaos.

Primero nos reímos, mucho, por esto, no por el efecto de la cerveza, pero después nos dimos cuenta de que deberíamos haber hablado y coordinado quien se encargaba de cada cosa. Hubiéramos disfrutado más culinariamente hablando claro!. 

En mi curso Digital Kit, hay dos herramientas que nos habrían ayudado mucho, zoom y algún gestor de proyectos como Trello o Asana, para comunicarnos y asignar que tareas debíamos llevar a cabo cada uno. 

Si te interesa saber como funcionan alguna de ellas y como las podríamos aplicar a una salida en el campo o a montar el lanzamiento de un negocio pincha en el siguiente enlace

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Curry ”no vuelvo a comer tortilla hasta que no se me olvide” Morales